El tiempo es dinero. Es algo que todos los impresores y convertidores flexográficos entienden. Cuanto más rápido se prepara el trabajo, se termina y se cambia al siguiente, más rentable es la impresora. Cada minuto que la impresora no funciona es dinero perdido.

Todos los segmentos del mercado concuerdan en que los tiempos de producción se están acortando y que la frecuencia de los pedidos está aumentando. Eso se debe al incremento de variedades y sabores dentro de la misma familia de marcas. Otro factor importante es que las campañas promocionales regionales y personalizadas son tendencia en la industria actual. Clasificar los distintos mercados por zona geográfica, intereses y demografía es la clave para personalizar las etiquetas y el envasado de un producto dirigido a grupos específicos. ¿Quién no ha buscado si su nombre figuraba en una botella de Coca-Cola?

Envasadores y consumidores están demandando más colores por envase y una vida útil más larga. Eso requiere revestimientos y más tinta para mejorar la durabilidad del envase.  Para responder, las impresoras deben tener 10 colores con equipos de decoración periférica y ser capaces de imprimir con finos detalles mediante un control de proceso más preciso.

Las iniciativas Lean y la reducción de existencias en las instalaciones del cliente tienden a acortar la duración de la producción, a requerir rápidos cambios de tarea y a bajar los precios – todo ello mientras el coste del material sigue subiendo.  Todo esto está agravando el desafío de rentabilizar los ciclos de producción cortos.

Para mayor presión, es cada vez más difícil encontrar y conservar operarios de impresora experimentados. ¿Cómo ha ocurrido?

La industria de la impresión siempre ha sido una industria artesanal en la que la mayoría de los operarios se formaba sobre la marcha o como aprendices. Los aprendices y muchos de los programas de escuelas y universidades que alimentaban la industria hace tiempo que pasaron.

Cuando ocurrió la recesión de 2007, la mano de obra industrial se vio gravemente afectada. Muchos empleados se fueron y las empresas dejaron de contratar durante casi cinco años. Los empleados despedidos - incluso si eran cualificados - decidieron que su futuro en la industria de la impresión flexográfica había desaparecido. El resultado final fue una grave reducción de la mano de obra.  Otra complicación fue la predicción de que todo lo relacionado con la imprenta iba a morir pronto.  Los jóvenes que empezaban a trabajar no querían entrar en una industria moribunda.

Así que ¿cómo resolvieron los impresores y los convertidores los problemas planteados por ciclos de producción más cortos, márgenes más estrechos y la falta de operarios cualificados? La respuesta reside en la nueva tecnología de impresión flexográfica que consigue abaratar los ciclos de producción cortos reduciendo los tiempos de configuración y los residuos. La repetibilidad también se ha convertido en un componente crítico para que el operario de la prensa produzca productos sellables de alta calidad.

“En general, los clientes se ven presionados por sus finanzas y les cuesta encontrar empleados cualificados,” comentó Rodney Pennings, director comercial de productos de imprenta, revestimiento y laminado de PCMC’. “Es esencial que los fabricantes de máquinas de imprimir incorporen tecnologías que permitan un cambio de tarea repetible y fiable, minimicen la configuración y los residuos y sistemas eficientes en gestión de tinta y consumo de energía.”

Los impresores están trabajando con los fabricantes de máquinas de impresión para desarrollar productos que funcionen a alta velocidad, ofrezcan entornos seguros y produzcan una calidad repetible.  Esto ha generado una tendencia a cambiar el diseño físico de programación/mandos.  Una arquitectura completa con servomotor aporta datos en tiempo real e información diagnóstica al operario.  Los sistemas mejorados de control de la tensión permiten controlar mejor la banda e imprimir la capacidad de tolerancia.  A través de la inspección por vídeo y otros sistemas de vigilancia, los operarios pueden hacer ajustes finos de la inclinación sobre la marcha en la plataforma de impresión.

La automatización del cambio de tarea, la repetibilidad de la configuración y una adecuada secuencia de pasos en el proceso aumenta la disponibilidad de la impresora.  Las tecnologías imprescindibles para afrontar unos plazos de producción cada vez más cortos son: nula velocidad inicial de impresión y ajuste de registro, gestión del color y de la viscosidad de la tinta, lavado automático de tinta/plataforma, limpieza del tambor central de impresión, secado sensible y de bajo consumo e impresión y registro por cámara en circuito cerrado.

El diseño integrado de la rasqueta de tinta utiliza mejor la tinta y permite más automatización junto con una mayor facilidad de uso. Es gracias a la preparación de la impresora sin herramientas y on-off.  Las pantallas táctiles multifunción de la estación de mandos integrada permite que los operarios accedan a muchas de las características y funciones con la yema de los dedos.

“Las impresoras deben tener unas características de funcionamiento que las hagan cómodas e intuitivas,” explicó Pennings. “Los paquetes formativos también deben tener en cuenta el entorno cambiante en el que los operarios han de mantenerse al corriente de la tecnología y del uso correcto de los equipo para aprovechar todo su potencial.”

En muchos sentidos, las características automáticas de las nuevas impresoras y la formación que viene con ellas han sustituido los programas de formación convencionales.  Este enfoque incrementa la rapidez con la que los nuevos operarios adquieren el conocimiento necesario para obtener óptimos resultados.

La industria está diseñando impresoras más compactas que permitan un acceso más fácil y seguro durante el trabajo y que agilice el cambio de tarea. Esto se debe a  la menor distancia que caminar, la posibilidad de dejar las cosas más cerca, un cambio de tarea automatizado y por no tener que usar elevadores o escaleras para cambiar de tarea. Las impresoras con manga y tecnología anilox ofrecen ventajas adicionales que reducen el cansancio del operario - ofrecen un trabajo más gratificante y satisfactorio.

Los diseños de impresora compacta son una ventaja para los impresores obligados a aprovechar el espacio disponible.  Ofrecen  más funciones en el mismo volumen y reparten el coste total de personal de apoyo en un gran número de funciones.  Las impresoras compactas también son menos costosas de comprar, instalar y mantener debido a que llevan menos piezas y más pequeñas.

Para tener mayor flexibilidad para satisfacer la demanda de la industria, muchos impresores están invirtiendo tanto en prensas de impresión central como en línea, lo que les permite diversificar su oferta de productos.  Los productos para imprimir que usan cartón o etiquetas, el film retráctil y demás films especiales se piden ahora como complemento al clásico film producido en el pasado. 

El tiempo para comercializar diseños de prensa nuevos o actualizados también se está acortando.  Los impresores están buscando fabricantes de máquinas de impresión dispuestos a colaborar en el desarrollo de mejores soluciones.  Además, algunas colaboraciones entre fabricantes de equipo original (OEM) e impresores han analizado en profundidad y refinado los procedimientos del cambio de tarea -  a menudo reduciendo el tiempo entre tareas hasta un 75% o más.

Los fabricantes de equipo original (OEM) que destacan por la excelencia de su impresión central y sus impresoras en línea capaces de imprimir con estrictas tolerancias sobre varias superficies, son valiosos socios para las imprentas. Los fabricantes de máquinas de imprimir siguen afrontando el reto de incorporar tecnologías de impresión totalmente probadas en diseños más pequeños de impresoras capaces de utilizar varios tipos de tinta con las tecnologías de secado adecuadas.

“Que los fabricantes de máquinas de impresión y sus clientes trabajen juntos en el diseño y desarrollo de mejores soluciones y equipos es vital para lograr la máxima eficacia y eficiencia,” explicó Pennings.

A medida que crece la industria del envase flexible, la búsqueda de tiempos de producción más cortos,  cambios de tareas más frecuentes, una mayor calidad y un tiempo de respuesta más corto va a intensificarse. La impresión flexográfica seguirá respondiendo a los retos que se avecinan. La alianza con los proveedores industriales será una de las claves de su éxito.