Imagine lo siguiente:  usted está cocinando la tarta de manzana según la receta de su abuela.  Está la base, el relleno y la cobertura, todo lo que la convierte en un postre increíble.  Cada pieza en su justa medida; demasiada nuez moscada anula el sabor de la canela.  Demasiado harina dejará seca la base.  Poca mantequilla en la cobertura la dejará grumosa.

Se puede afrontar la tarea de dos maneras.  Una: tantear, ir ajustando los ingredientes hasta lograr la receta de la abuela.  Puede que se pierdan muchas tartas, pero a la larga, se parecerá bastante.  O dos: pedirle la receta a la abuela y duplicarla fielmente.  Ella ya sabe lo que funciona, ¿para qué seguir tanteando?

Seguramente usted ha elegido la opción dos.  Es mucho más fácil y ¡no se pierde ninguna tarta!

En PCMC, no queremos que usted tire ninguna tarta… o producto.  Le damos la receta en la interfaz hombre-máquina (HMI) de su impresora flexográfica.  Cuando se utiliza un producto por primera vez, puede que se tantee un poco, como cuando la abuela iba perfeccionando su tarta de manzana.  Pero una vez que se sabe, ya es para siempre.  Así, la próxima vez que utilice ese producto, ya tendrá todas las configuraciones listas para funcionar.

La abuela sabía pasar de la tarta de manzana a la de cerezas mirando sus recetas.  Usted puede cambiar de producto con las suyas.  Puede guardar múltiple recetas en su HMI y cambiar de producto sin problema.  Solo hay que pulsar unas teclas para cargar una receta guardada.

También puede modificar una receta existente para hacer un producto similar.  Supongamos que quiere hacer una tarta de manzana con rejilla en vez de francesa.  Muchos de los componentes son los mismos: el relleno, la base, etc.  Solo hay que cambiar la cobertura de la receta.  Haga lo mismo con las fórmulas.  Cargue una fórmula existente, haga los ajustes necesarios y guárdela con nuevo nombre de fichero.  Así evitará los tanteos iniciales asociados a una tarea nueva.

Hemos comprobado una importante reducción del tiempo para el cambio de tarea cuando el cliente dispone de fórmulas precisas en su HMI.  Cuando las fórmulas se utilizan junto con una buena preparación, un entorno laboral bien organizado y un flujo de trabajo eficiente, el cambio de tarea suele tardar la mitad.  Piense en todo el producto adicional que podría estar produciendo.

Las recetas reducen los residuos y la inactividad.  La abuela lo sabía… porque la abuela es muy sabia.